En ciudades como Tlajomulco, el crecimiento acelerado de fraccionamientos privados cerca de avenidas principales ha transformado la dinámica urbana generando cuellos de botella, desvíos innecesarios y saturación en puntos clave. Esto no solo afecta la movilidad, sino también la calidad de vida de quienes viven dentro y fuera de estos desarrollos.

Según especialistas en urbanismo, como Bernd Pfannenstein, investigador de la Universidad de Passau, este modelo de vivienda cerrada —con muros perimetrales y accesos controlados— ha generado ciudades disfuncionales provocando:

• Reducción de conectividad vial: Los fraccionamientos bloquean calles que antes eran de libre tránsito, obligando a rodeos y embotellamientos.

• Presión sobre avenidas principales: Al concentrar el acceso en pocas entradas, las vialidades cercanas se saturan, especialmente en horas pico.

¿Cómo afecta esto a la ciudad?

• Menor eficiencia del transporte público: Las rutas deben adaptarse a calles cerradas, lo que reduce cobertura y aumenta tiempos de traslado.

• Aumento de emisiones: Más tráfico significa más autos detenidos y mayor contaminación.

• Desconexión social: Los muros físicos también se convierten en barreras emocionales entre colonias.

Es fundamental adoptar un enfoque de urbanismo permeable. Esto implica diseñar desarrollos con múltiples accesos que se integren al tejido urbano. Las autoridades municipales pueden implementar normativas que exijan estudios de impacto vial antes de aprobar nuevos proyectos, además de fomentar infraestructura compartida como corredores peatonales y ciclovías. 

En Bogotá, Colombia, el crecimiento de conjuntos cerrados en zonas como Suba y Usaquén provocó problemas similares. Para enfrentarlo, la ciudad adoptó el modelo de “supermanzanas”, agrupaciones de barrios con calles interiores de baja velocidad conectadas por corredores principales abiertos al tránsito. Esta estrategia no solo mejoró la movilidad, sino que también incentivó la cohesión social y el uso eficiente del espacio público.

En Venicasa, creemos que el desarrollo urbano debe equilibrar la privacidad con la conectividad. La comodidad no debe estar peleada con la movilidad. Cómo inmobiliaria, tenemos la responsabilidad de inspirar y proponer soluciones que conecten corazones con hogares… sin desconectar a la ciudad.

Planificación urbana y la influencia de las urbanizaciones cerradas: El Área Metropolitana de Guadalajara, México - Bernd Pfannenstein.

Publicado en la revista Economía, Sociedad y Territorio, volumen 19, número 59 (enero–abril 2019)